Tu presencia
“Le digo mil veces a mi corazón;
que deje de palpitar tan de prisa, al verte.
Le repito y repito a mis ojos;
que no se den vuelta a mirarte, cuando pasas junto a mí.
Le recuerdo a mis tercos pasos;
que no te sigan, cuando tú te vas.
Le reto y regaño a mis labios;
que desean y no dejan de desearte, cuando tu me saludas al pasar.
Le reclamo a mi mente;
que no te deja de pensar, cuando estás lejos.
Y le reprocho a la noche por llegar, pues en cada una no te dejo de soñarâ€.
que deje de palpitar tan de prisa, al verte.
Le repito y repito a mis ojos;
que no se den vuelta a mirarte, cuando pasas junto a mí.
Le recuerdo a mis tercos pasos;
que no te sigan, cuando tú te vas.
Le reto y regaño a mis labios;
que desean y no dejan de desearte, cuando tu me saludas al pasar.
Le reclamo a mi mente;
que no te deja de pensar, cuando estás lejos.
Y le reprocho a la noche por llegar, pues en cada una no te dejo de soñarâ€.
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